RESIDENCIA No.6 


MI AMOR ES UNA FLOR Y UNA NUBE

Don Jesus Alcántara Jiménez



La vocación de Don Jesús por el dibujo y la pintura es una vocación amorosa. Así lo declara y, frente a un obra que ha venido haciendo a lo largo de los último cuarenta años, no podemos sino verlo confirmado. Frente a una realidad violenta y opresiva, él encontró refugio en el trazo de líneas remedando caras y objetos, deformándolos, jugando con sus tamaños y proporciones, tejiendo desde la pedacería de la forma y los contornos, las sombras y transparencias, un mundo de color que, celebrando su propensión monstruosa, la conjura; como quienes disfrazados se congregan para celebrar el carnaval. No son los daimones a lo que representa, en su remedo lo que nos ofrece es un talismán.
Don Jesús es meticuloso en la preparación de su mesa de trabajo: es un proceso a mitad de camino entre el ritual y lo rutinario, dispone frascos y pinceles, papeles y lápices, se queda un momento de pie, cerciorándose de que todo esté en su
lugar, y luego se sienta. Escoge alguno de los dibujos en los que ha estado trabajando, lo examina a contraluz y luego, como si algo le dijera, puesto sobre la mesa lo ataca con medida y parsimonia, abandonado al trazo percudido de sombras, el diluido de acuarelas y temperas, en un acto traído a cuenta día con día, transformándose en sus formas y proporciones, en los vertidos de colores que, igual pesan saturados que se diluyen en matices que, des-definiendo todo contorno, van llenando una marginalia festiva llena de intuiciones y asombros.

Más allá de asumidos y convenciones, armada de pequeñas revelaciones y descubrimientos su obra se constituye como catálogo de vida que se afirma como salida y vindicación. Se asoma ahí la pregunta de la representación, de la cosa en lugar de la cosa, de las paradojas de la composición y sus posibles soluciones, llevadas en su proceso a extremos barrocos que la desdicen de la realidad para venirla a constituir en ese aparte abierto en nuestra percepción que la conjura y la sustituye. Ese aparte que nos sirve a unos y otros de refugio y que ahora, en estos tiempos tan llenos de cambios, Don Jesús, generoso, viene a ofrecernos a manos llenas.


︎Texto sobre Don Jesús por Pablo Rodríguez Mesa


︎ Link a artículo en El País